COMPOSCIÓN.
Aceite de oliva virgen, Aceite de coco, Manteca de cacao, Aceite de palma, Aceite de jojoba, Aceite de pepita de uva,Cera de Abejas, Azúcar, Miel, Aceite esencial de vetiver, canela y limón. Hidróxido sódico y Agua destilada.
APLICACIONES Y PROPIEDADES
EL ACEITE DE JOJOBA es una cera que actúa directamente contra el envejecimiento, hidrata las pieles secas, nutre el cabello y evita la acumulación del sebum. La aplicación habitual del aceite de jojoba facilita los procesos de regeneración celular y aumenta tanto la elasticidad como la suavidad y firmeza de la piel. Además de su alto contenido en ceramidas, también está presente en el aceite de jojoba la vitamina E, que actúa como antioxidante y protege a la piel de los radicales libres.
APLICACIONES Y PROPIEDADES
EL ACEITE DE JOJOBA es una cera que actúa directamente contra el envejecimiento, hidrata las pieles secas, nutre el cabello y evita la acumulación del sebum. La aplicación habitual del aceite de jojoba facilita los procesos de regeneración celular y aumenta tanto la elasticidad como la suavidad y firmeza de la piel. Además de su alto contenido en ceramidas, también está presente en el aceite de jojoba la vitamina E, que actúa como antioxidante y protege a la piel de los radicales libres.
LA MIEL se utiliza en los jabones por ser muy eficaz para frenar la aparición de radicales libres, es decir los agentes responsables del envejecimiento de la piel; y para dar elasticidad al rostro y al cuello.Más allá de su dulce sabor, por sus propiedades cicatrizantes y humectantes la convierten en el ingrediente número uno de jabones, cremas y ungüentos para la piel.
SABÍAS QUE…
LA JOJOBA es un producto natural que se extrae de las semillas de la planta que lleva su nombre y que es un arbusto originario del desierto de Sonora, al norte de Mexico. Durante cientos de años, fue reconocida y utilizada por los Aztecas antes del descubrimiento de América, quienes le atribuyeron propiedades mágicas. Recientes investigaciones confirman que las leyendas Aztecas, son superadas con creces por las propiedades reales de éste aceite (o más correctamente, cera líquida), de composición química similar a las ceramidas de nuestra piel.
LA MIEL fue utilizada en la antigüedad para el cuidado de la piel principalmente como un hidratante natural. Además, por sus sorprendentes virtudes emolientes, nutritivas y por sus propiedades antisépticas. En Egipto, Grecia y Roma ya se conocían sus cualidades hidratantes. De hecho, formaba parte de la composición de mascarillas, ungüentos para después del baño, lociones faciales, entre otros. Por ejemplo, en Asia, se mezclaba miel con yema de huevo y con aceite de almendras para hacer un bálsamo suavizante. Las Hetairas griegas dormían con una máscara de albayalde y miel que se quitaban con agua nada más levantarse. Famosos son los baños de Cleopatra (Egipto) en leche de burra con miel.
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